El tiempo no estuvo de nuestra parte arreciando el viento y el mar causado por unos térmicos no esperados que se formaron sobre la costa poco antes de tomar la salida.
Pese a todo con una tripulación con ganas izamos la mayor con un rizo y nos lanzamos a batirnos con el mar, con el consiguiente revuelto de estómagos que llevó a algún que otro mareo incluso de la tripulación mas experimentada. (las fotos están aquí)
Las maniobras salieron muy bien aunque para los cañas asignados la cosa era más difícil pues con viento y ola llevar el barco a rumbo se complica un poquito. La video-secuencia nos muestra con claridad lo animado que estaba el día.
Después de dos horas volvimos a puerto para poder hacer cómodamente el aperitivo programado y emplear el tiempo restante en charlas y conversaciones amenas.
La comida en La Dolce Vita resulto como ya es habitual distendida y agradable, culminando con la entrega de diplomas acreditativos de la jornada.
¡¡Repetiremos!!
Entradas
